El comportamiento de los que dan ...
Trigésimo Segundo Domingo Del Tiempo Ordinario
10 De Noviembre De 2024
El comportamiento de los que dan aun de lo que ellos mismos necesitan es signo del espíritu de sacrificio y de generosidad. Cristo que se ofreció una sola vez para quitar los pecados de todos, es la fuerza y la esperanza de todos los que quieren ese camino de entrega a los demás.
ORACION COLECTA
Padre, compasivo y misericordioso, y que conoces bien el corazón ferviente de quienes te suplican, derrama tu bendición sobre nosotros, unidos y congregados en una misma esperanza hacia ti, y haz que, estimulados por tu palabra, sepamos ofrecerte nuestra vida diaria. Por nuestro Señor Jesucristo
PRIMERA LECTURA: 1R 17,10-16
Para el pueblo de Israel, las viudas, los huérfanos y extranjeros son ejemplos de vida indefensa, de gente que sólo tiene a Dios como protector. De estas personas indefensas y pobres se sacan claros ejemplos de hospitalidad y generosidad.
SALMO RESPONSORIAL
R/ ALABA, ALMA MÍA, AL SEÑOR
Mantiene su fidelidad perpetuamente,
Su justicia da a los oprimidos.
Proporciona su pan a los hambrientos.
El Señor deja libres a los presos.
El Señor da la vista a los ciegos
El Señor endereza a los encorvados,
El Señor ama a los justos.
Da el Señor protección al forastero.
Reanima al huérfano y a la viuda,
Mas desvía el camino de los malvados.
El Señor reina para siempre,
Tu Dios, Sion, de generación en generación.
SEGUNDA LECTURA: Hb 9,24-28
Cristo es el centro de la historia. Vino a borrar los pecados del mundo, y vendrá a salvar a los que en él esperan. Creer en Cristo significa creer que hemos sido salvados y vivir agradeciendo lo que hizo por nosotros.
ALELUYA
Aleluya, aleluya.
Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos.
Aleluya, aleluya.
EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS: Mc 12, 38-44
Jesús alaba a los que confían en Dios, a los que buscan el Reino y dejan su salvación en las manos del Padre. Por el contrario, los que no confían en Dios ponen su esperanza en el dinero, en el honor, en las alabanzas de los demás hombres.